¡Tu localización al descubierto!

Aunque pueda parecer que compartir la geolocalización del dispositivo móvil es una acción sin consecuencias, lo cierto es que esconde muchos riesgos que pueden poner en peligro nuestra seguridad.

Si un ladrón te preguntara cuál es la dirección de tu casa, ¿se la facilitarías? Seguro que no. Los ciber atacantes tienen la misma facilidad para conocer nuestro domicilio o los lugares que frecuentamos si permitimos a nuestro dispositivo que comparta nuestra ubicación.

¿Cómo funciona la geolocalización de nuestro dispositivo?

La geolocalización se podría entender como la habilidad que tiene nuestro dispositivo móvil para conseguir un acceso permanente a nuestra ubicación, tanto en tiempo real como ubicaciones pasadas.

Pese a que tendamos a asociar la geolocalización a aplicaciones móviles relacionadas con la navegación, como es el caso de Google Maps, existen muchas otras que tienen acceso a nuestra ubicación y que pueden suponer un grave riesgo para nuestra seguridad. Un gran ejemplo de estas aplicaciones son las redes sociales. Con tan sólo una foto, se pueden obtener las coordenadas exactas de nuestra ubicación, a través de un código que se graba en la imagen.

Estos son algunos de los riesgos que existen si autorizamos a nuestro dispositivo para que comparta con otras aplicaciones nuestra ubicación:

• Conocer tu ubicación en todo momento: Permite a millones de usuarios desconocidos poder conocer en todo momento donde estás, creando un mapa de nuestros movimientos y exponiéndonos así a robo de información personal o a ser víctimas de ataques dirigidos.
• Conocer también dónde NO estás: Cuando subimos a nuestras redes sociales una foto en nuestro lugar de vacaciones o lejos de nuestro hogar, estamos haciéndole saber a los ciberdelincuentes que nuestra casa se encuentra vacía, y podríamos ser víctimas de robos físicos.
• Exposición de nuestros familiares o amigos: Al compartir una imagen en la que nos encontramos con alguien más, esa persona también pasará a ser víctima de los riesgos comentados anteriormente.

Para evitar todos estos riesgos y proteger nuestra seguridad, es importante que sigamos los siguientes consejos:

1. Desactivar los permisos de geolocalización: En todas aquellas aplicaciones en las que no sean necesarios, como redes sociales, la aplicación de cámara u otras aplicaciones de compartición de contenido, debemos de desactivar el acceso a nuestra ubicación.
2. Comparte únicamente cuando sea necesario: En aplicaciones de navegación como Google Maps, aplicaciones de delivery o de previsión climatológica, que necesitan nuestra ubicación para su utilidad, cambiar la habilitación a nuestra geolocalización a la opción de “compartir sólo mientras se usa la aplicación” para minimizar nuestra exposición.
3. Inhabilita el acceso innecesario a tus datos: Impide también el acceso a otros datos, como tus contactos o información bancaria, en aplicaciones cuya utilidad no lo requiere, como juegos o reproductores de vídeo. Revisa las condiciones de privacidad de las aplicaciones que descargues.

Sigue todas estas buenas prácticas para evitar que los ciberdelincuentes conozcan tu ubicación. Protégete de cualquier amenaza y recuerda que ser ciberseguro está en tus manos.