Poner una pequeña tienda online: obligaciones y derechos
17-11-2014
Poner una pequeña tienda online: obligaciones y derechos
Como actividad principal o como manera de obtener un ingreso extra, es posible que alguna vez se nos haya ocurrido la idea de montar una tienda online. Pero, ¿por dónde se empieza? ¿Hay que darse de alta como autónomo? ¿Hay que pagar IVA? ¿Cómo se declaran los ingresos?
La respuesta corta es que al iniciar cualquier actividad que implique firmar contratos y emitir facturas (y al servir un producto se establece un contrato de venta con un cliente) es necesario tener toda la documentación en regla, por lo que sí, tendríamos que estar dados de alta en autónomos. Sin embargo, esta respuesta puede tener sus matices, ya que en principio están exentos de esta obligación aquellos que realicen ventas de forma esporádica. A continuación, profundizamos sobre esta cuestión.
Alta en Hacienda y Seguridad Social, ¿cuándo es obligatorio?
Lo que comúnmente llamamos “alta en autónomos” son realidad dos trámites, uno con Hacienda y uno con la Seguridad Social:
- Alta en el IAE en la Agencia Tributaria / AEAT (Hacienda) con el modelo 037 o 036.
- Alta en en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos / RETA (Seguridad Social) con el modelo TA.0521/1
El segundo nos da la cobertura de la Seguridad Social e implica el pago de una cuota mensual, que depende de la base de cotización y de si tenemos algún tipo de subvención en la cuota (mujer menor de 35 años, hombre menor de 30, alta como nuevo autónomo…) pero ronda los 261,83 euros.
Sin embargo, existe una salvedad importante a lo que acabamos de contar. Al montar una tienda online parece claro que, sobre todo al inicio de la actividad, o si nos lo planteamos como una fuente de ingresos secundarios, no vamos a ganar tanto como para poder pagar esa cuota. En ese sentido, hay jurisprudencia previa que exime de este pago siempre y cuando los ingresos no sobrepasen el salario mínimo interprofesional (fijado en 2014 en un poco menos de 9000 euros anuales). A pesar de ello, si la Seguridad Social decide hacer una inspección, estaremos expuestos a su criterio en ese momento, y tendremos que acudir a la vía judicial para demostrar que nuestra actividad es esporádica.
Obligaciones específicas de la venta online
Aparte de los trámites comunes a cualquier actividad económica, abrir un comercio online tiene unas obligaciones concretas, regidas por la Ley de Servicios de la Sociedad de la Información y de Comercio Electrónico en España (LSSICE), la Ley de Ordenación del Comercio Minorista (que regula las ventas a distancia) y la Ley Orgánica de Protección de datos de Carácter Personal (LOPD). Estas son las principales obligaciones que establecen estas leyes para iniciar un negocio en Red:
- Indicar de manera clara e inequívoca nuestro nombre o denominación social, los datos de contacto y el NIF o CIF.
- Asimismo, la información de los productos tiene que ser clara e indicar el precio final, los impuestos, los gastos de envío, los plazos de entrega, la validez de la oferta, etc.
- Derecho de desestimiento: tras los cambios en la Ley del Consumidor, pasa de 7 a 14 días y es obligatorio poner a disposición del consumidor un formulario para ejercer este derecho.
- Como vendedores, somos responsables de cualquier percance que sufra la mercancía durante el transporte, hasta el momento en que es entregada.
- Ya que manejaremos datos personales, debemos darnos de alta en el Agencia Española de Protección de Datos. Hay dos niveles de protección, el básico y el medio. Tendremos que cumplir el nivel medio si manejamos directamente datos bancarios, pero si el pago es vía PayPal, o vía una TPV Virtual bastará con el nivel básico, ya que los datos bancarios los gestiona Paypal o la entidad bancaria, no nosotros.
- Es imprescindible contar con autorización previa si se quiere mandar ofertas u otras comunicaciones a clientes y usuarios. Es decir, no se puede enviar una promoción a todos los clientes si antes específicamente no han indicado que quieren recibir promociones.
- Las condiciones de uso y términos generales del servicio tienen que estar presentes en la web de manera visible.
Crear un negocio online, además de todos los trámites y obligaciones, supone montar una web para poder vender esos productos. Naturalmente, podemos hacerla nosotros mismos si contamos con los conocimientos técnicos necesarios o contactar con los servicios de profesionales o agencias dedicadas a crear páginas en internet. Como decíamos más arriba, seguramente necesitaremos algún tipo de plataforma de pago virtual como la que ofrecemos en LABORAL Kutxa a nuestros clientes.
Aunque si no queremos complicarnos mucho y nos interesa probar a vender unos pocos productos y ver cómo va la cosa, hoy en día existen varias plataformas que ofrecen ese servicio a cambio de una cuota fija o de una comisión por venta. Algunas de estas plataformas son, además, un buen escaparate, ya que cuentan con una comunidad de usuarios previa, que puede llegar a nuestros productos mientras “pasea” por ese mercado virtual.
Algunas de ellas son:
- DaWanda: Se define como un mercado de creaciones originales y podemos encontrar desde ropa hasta bisutería o muebles creativos. Hace énfasis en productos originales y creativos. Abrir la tienda es gratuito y se quedan una comisión del 10% de cada venta.
- Etsy: Se centra en productos hechos a mano. Cobra 20 céntimos de dólar por publicar un producto durante 4 meses y se queda un 3,5% del precio una vez se haya realizado la venta. Tanto Etsy como Wanda funcionan como un mercado global y su principal ventaja es que puedes llegar a más usuarios.
- Shopify: Permite vender todo tipo de productos, también digitales. Ofrece 14 días de prueba sin coste alguno y, a partir de ahí, hay varias opciones de pago mensual para elegir. Por 14 dólares al mes se pueden subir hasta 25 productos, y Shopify se queda además con un 2% de comisión sobre el precio de cada venta. Por 29 dólares al mes podemos tener productos ilimitados e igual comisión del 2%.
- Toldo: Ofrece un mes de prueba gratuita y a partir de ahí funciona sin comisiones sobre las ventas, con una tarifa plana única de 10 euros al mes.
- La Tostadora: Se trata de un servicio para personalizar camisetas, ropa, o fundas de iPhone con diseños propios y ponerlos a la venta. Según el producto, la plataforma ofrece un precio base, y a partir de ahí, todo lo que se añada como margen será el beneficio para el vendedor. Ellos se encargan de la impresión y del envío de los bienes.
¿Cuál es tu reacción?