La antropóloga feminista Teresa del Valle recogió ayer el Premio Eusko Ikaskuntza-LABORAL Kutxa al mejor curriculum del año

La antropóloga feminista Teresa del Valle recogió ayer el Premio Eusko Ikaskuntza-LABORAL Kutxa al mejor curriculum del año

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La antropóloga feminista Teresa del Valle recogió ayer el Premio Eusko Ikaskuntza-LABORAL Kutxa al mejor curriculum del año

Fue en el Ayuntamiento de Donostia-San Sebastián, en una ceremonia que contó con la más alta representación institucional, encabezada por el alcalde Eneko Goya y, cómo no, por los presidentes de Eusko Ikaskuntza y LABORAL Kutxa, Iñaki Dorronsoro y Txomin García.

No era para menos. Se concedía a la antropóloga Teresa del Valle el premio al Mejor Curriculum Vasco, uno de los galardones más prestigiosos en el campo de las Artes, las Ciencias Sociales y las Humanidades.

Desde 1995, la Sociedad de Estudios Vascos-Eusko Ikaskuntza y LABORAL Kutxa hemos reconocido cada año la labor de personalidades del ámbito del conocimiento y de la cultura, como el escultor Eduardo Txillida, el antropólogo Julio Caro Baroja, la soprano María Bayo o el director de cine Montxo Armendariz.

Tal y como se reconoció ayer durante la ceremonia de entrega del premio, Teresa del Valle fue una de las primeras y principales impulsoras de la Antropología feminista en el Estado español y su obra ha contribuido de manera efectiva al desarrollo cultural con perspectiva de género en nuestro país.

Un curriculum brillante centrado en el estudio de las desigualdades de género

Durante más de 40 años, Teresa del Valle (Donostia-San Sebastián, 1937) ha desarrollado una importante actividad divulgadora, en el ámbito de la docencia y de la investigación. Fue la primera persona en obtener la Cátedra de Antropología Social de la EHU/UPV en 1988 y desde 2007 es Catedrática Emérita de Antropología Social en esa misma institución.

Inicialmente, cursó estudios de historia y de antropología en los Estados Unidos donde se doctoró en la segunda de las especialidades. Lo hizo en la Universidad de Hawaii, en 1974, con un trabajo centrado en el estudio de Micronesia. De vuelta al Estado español, obtuvo la Licenciatura en Geografía e Historia en la Universidad de Barcelona (1980) y se doctoró en la Universidad del País Vasco (1981). Para entonces llevaba 2 años en la Facultad de Gipuzkoa, impartiendo por primera vez en la historia de la UPV-EHU la materia de Antropología social. Poco después se convirtió en la primera persona en impartir un curso de Doctorado en el mismo campo (“Diferenciación y jerarquización sexual”, 1984).

Es autora de 9 libros, editora de 4 y coautora de 3, además de haber participado en numerosas publicaciones. Le corresponde, además, el mérito de haber dirigido Mujer vasca. Imagen y realidad (Barcelona: Anthropos 1985), un libro considerado como punto de partida para la antropología feminista en el contexto vasco.

Su trabajo por visibilizar e internacionalizar su campo de estudio, la ha llevado a pertenecer al grupo fundador de la European Association of Social Anthropologists (EASA, 1989) del que fue su primera vicepresidenta. Además, fue vicepresidenta de Gipuzkoa de Eusko Ikaskuntza (2006-2010) y es miembro de Jakiunde, Academia de las Ciencias, las Artes y las Letras. En 2010 su labor académica en el ámbito de los estudios de género le valió el Premio Emakunde.

Embargada por la emoción

Tal y como se reconoció ayer durante la ceremonia de entrega del premio, Teresa del Valle fue una de las primeras y principales impulsoras de la Antropología feminista en el Estado español y su obra ha contribuido de manera efectiva al desarrollo cultural con perspectiva de género en nuestro país.

El lehendakari Iñigo Urkullu, presente en la ceremonia, se refirió a ella como una pionera por su vocación de formación de personas investigadoras, porque a día de hoy sigue investigando y aportando conocimiento a la antropología social y “por contribuir a través de su impulso a la Antropología, a que nos conozcamos más y mejor”.

Teresa del Valle, por su parte, agradeció el premio “embargada por la emoción” y, tras hacer repaso a su carrera, quiso tener unas palabras contra la violencia de género y sobre la necesidad de aprovechar el momento histórico para hacer frente a este problema. En su opinión, «si logramos avanzar y erradicar esa lacra, creo que seremos una sociedad más actual, más coherente y responsable ante el destino y ante el papel que queremos seguir jugando en este mundo».

Eusko Ikaskuntza: 100 años impulsando el progreso y el conocimiento

No hay muchas instituciones que puedan celebrar un siglo de vida. Por eso es un año especial para Eusko Ikaskuntza - Sociedad de Estudios Vascos una institución científico cultural que, desde 1918, ha sido una herramienta al servicio de la cultura vasca.

Creada por las Diputaciones Forales de Araba, Bizkaia, Gipuzkoa y Navarra, su aportación fue clave para para poner en marcha la Academia de la Lengua Vasca. Además, coordinó los primeros textos escolares en euskera, apostó por la sistematización archivológica y documental de la cultura vasca y ha apoyado numerosos trabajos de prospección arqueológica. Su historia es la historia de la pasión por el progreso y el conocimiento, por la memoria histórica y el avance en las artes y las ciencias.

En su página web se pueden encontrar recursos imprescindibles para cualquier persona que quiera acercarse al estudio de nuestro país y de nuestra cultura, como la Enciclopedia Auñamendi Digital, el cancionero tradicional vasco (que recoge más de 5.000 temas) y la recopilación de la cultura vasca en la prensa más extensa del Siglo XX.


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