
Micrófonos y cámaras: la puerta trasera de tu privacidad
08-09-2025
Micrófonos y cámaras: la puerta trasera de tu privacidad
Nuestros dispositivos no solo se han convertido en herramientas que nos facilitan nuestras tareas diarias, sino que también se han convertido en vectores de entrada para los ciberdelincuentes o, incluso, en ventanas para espiarnos.
Esto último es lo que se conoce como espionaje digital, y pone en peligro la privacidad personal y profesional de la información almacenada en el dispositivo, además de exponernos a robos de información, extorsiones o daños económicos.
Señales de posible espionaje
Las consecuencias del espionaje digital hacen que la protección del dispositivo ocupe un lugar primordial en nuestra agenda de buenas prácticas en ciberseguridad.
Detectar que un ciberdelincuente está espiando la cámara o el micrófono de tu dispositivo puede parecer complicado, pero existen varias señales de alerta que pueden ayudarte:
- La luz de la cámara se mantiene encendida sin estar haciendo uso de ella: algunos dispositivos tienen incorporada una luz que se activa de forma automática cuando la cámara está siendo utilizada por alguna aplicación. Si se enciende mientras no esté en uso, puede tratarse de una señal de espionaje.
- Sobrecalentamiento del dispositivo: cuando un dispositivo está siendo víctima de espionaje es común que se sobrecaliente debido a la multitud de tareas y procesos a los que está siendo sometido de forma simultánea.
- Aplicaciones con permisos excesivos: existen aplicaciones que pueden tener acceso a ciertas configuraciones de tu dispositivo sin que seas plenamente consciente de ello. Esta es una de las principales vías de espionaje digital, debido a que los usuarios no suelen revisar de forma periódica los permisos de sus aplicaciones.
- Interferencias o ecos durante las llamadas: la presencia de ruidos extraños, interferencias o sonidos de fondo inusuales pueden estar debidos a que un ciberdelincuente se encuentra manipulando nuestro dispositivo.
Identificar todas estas señales a tiempo, además de aplicar algunas de las buenas prácticas que presentamos a continuación, pueden marcar la diferencia entre la privacidad y la intrusión digital:
- Mantener el sistema operativo y el antivirus actualizado: las actualizaciones corrigen vulnerabilidades de seguridad que los ciberdelincuentes pueden utilizar para entrar a nuestros dispositivos. Con una buena protección, estaremos cerrándoles la puerta de acceso a nuestra información.
- Conectarse únicamente a redes Wi-Fi seguras: las redes abiertas permiten que los ciberdelincuentes intercepten tus datos y accedan a tus dispositivos. Las redes protegidas con contraseñas y el uso de VPNs permiten cifrar el dispositivo contra accesos no autorizados.
- Revisar permisos de aplicaciones periódicamente: es fundamental revisar de forma regular los permisos que tienen las aplicaciones, revocando aquellos que sean innecesarios para evitar que se conviertan en el puente entre los ciberdelincuentes y tu información.
- Cubrir la cámara del dispositivo: tapar la cámara de forma física con un adhesivo o una tapa sobre la lente ayuda a reforzar la seguridad para evitar grabaciones no autorizadas.
Recuerda: la mejor defensa contra el espionaje digital es la prevención.
¿Cuál es tu reacción?