Las perspectivas de las empresas vascas experimentan una mejoría pero continúan en niveles de recesión

Las perspectivas de las empresas vascas experimentan una mejoría pero continúan en niveles de recesión

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Las perspectivas de las empresas vascas experimentan una mejoría pero continúan en niveles de recesión

La elevada incidencia de la pandemia mantiene los niveles de confianza de las empresas vascas en valores propios de una coyuntura de recesión, aunque también registran una mejoría con respecto a los datos obtenidos para el primer trimestre de 2021. En concreto, el Índice de Confianza Empresarial en Euskadi para el segundo trimestre del año ha quedado fijado en 42,8 puntos, muy por encima de los 31,4 puntos registrados en la serie anterior. A pesar de que esa cifra se encuentra todavía por debajo de los 50 puntos que delimitan la zona de contracción, también es muy superior a los registros del último año y apunta a una evolución favorable gracias a las expectativas de vacunación y a la contención de las cifras de contagio.

gráfico informe

Pese a ello, la incertidumbre que todavía existe en torno a los efectos de la pandemia sobre la economía alimentan un pesimismo que se extiende entre casi la mitad de las empresas vascas (el 49,4%) frente a solo el 18,8% que cree que la situación mejorará en los próximos tres meses, según recoge la encuesta realizada a 400 empresas de la Comunidad Autónoma del País Vasco por el Departamento de Estudios de LABORAL Kutxa.

Este pesimismo se ve reflejado en casi todos los parámetros de la encuesta, aunque de forma más leve que en los estudios anteriores. Por ejemplo, la mayor parte de las empresas encuestadas, el 42,6%, cree que su facturación se mantendrá sin cambios durante el próximo trimestre frente al 32,5% que opina que será inferior, cuando hace solo tres meses más de la mitad opinaba que su facturación descendería.

Algo similar ocurre con la actividad y con los pedidos: en el primer caso, el 47,8% de las empresas cree que su actividad se mantendrá igual que durante el primer trimestre, mientras que el 35,4% cree que empeorará, y el 16,9% pronostica una mejoría. Y con respecto a los pedidos, casi la mitad, el 48,4% cree que serán similares, frente al 30,9% que teme que el volumen disminuya.

Esta tendencia continuista se observa de forma más evidente en el caso de la evolución de los precios puesto que el 60,2% cree que se mantendrán sin cambios frente al 28,3% que cree que serán inferiores y un 11,5% que opina que sufrirán un ascenso.

Con respecto a la rentabilidad de las operaciones, solo un 10,8% espera conseguir rendimientos superiores a los del primer trimestre frente al 89,2% que cree que se mantendrán en valores inferiores (37,9%) o iguales (51,3%) al de ese periodo.

Las empresas tampoco tienen previsto mejorar su nivel de inversión de cara al próximo trimestre: el 56,1% apuesta por mantenerla igual durante los próximos tres meses, aunque casi la tercera parte (el 30,3%) piensa que disminuirá y solo un 13,7% apuesta por aumentarla.

Por último, el empleo prosigue con su lenta consolidación de manera que el 73% de las empresas confía en mantenerlo en los mismos niveles que en el primer trimestre frente al 15,9% que piensa que disminuirá. Esta última cifra es significativamente inferior que la registrada hace tres meses, cuando el 29,5% de las organizaciones encuestadas se mostraba convencida de una reducción de las plantillas.

Junto al Índice de Confianza Empresarial, el estudio elaborado por LABORAL Kutxa recoge indicadores de actividad reciente que permiten dibujar un escenario económico más preciso. El primero de ellos revela que el 54,4% de las empresas ha visto cómo se han reducido sus exportaciones, frente al 40,4% que las han mantenido sin cambios y un 5,3% que las han mejorado. La salud de la Innovación o de las iniciativas de I+D tampoco ha mejorado: el 78,9% sitúa el porcentaje de ventas destinado a este capítulo entre un 0 y un 1%, y solo el 3,8% dice haber invertido más de un 5%.

Por último, los plazos de cobro a clientes se han mantenido sin cambios para el 68,2% de las empresas encuestadas, mientras que casi el 25% ha sufrido demoras y el 7% ha visto reducidos los plazos de cobro. Y el acceso a financiación bancaria apenas ha sufrido variaciones durante el último año, ya que el 69,7% han podido hacerlo en las mismas condiciones.

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