Las mujeres en LABORAL Kutxa

Las mujeres en LABORAL Kutxa

4 min.

Las mujeres en LABORAL Kutxa

Hasta 1978 las mujeres casadas no podían abrir una cuenta corriente en LABORAL Kutxa (antes Euskadiko Kutxa) sin el permiso de sus maridos. No era una decisión de nuestra entidad, sino una disposición legal que estábamos obligadas a cumplir todas las cajas y bancos. Aunque estas prácticas machistas nos parezcan propias de un pasado remoto, la igualdad ante la ley de hombres y mujeres es una conquista muy reciente.

En LABORAL Kutxa somos conscientes de que la igualdad formal no es suficiente para superar siglos de desigualdad en el acceso de la mujer al ámbito laboral. Por eso fuimos una de las primeras entidades en instaurar políticas activas que persiguen que algún día logremos la igualdad real. No será fácil, pero éste es nuestro compromiso. Creemos con convencimiento que hay otra forma de hacer las cosas.

El trabajo para acercarnos a la igualdad entre géneros no es algo nuevo para quienes somos parte de LABORAL Kutxa: hace dos décadas ya empezamos a trabajar específicamente este tema. En 1997 fuimos una de las primeras organizaciones en ser reconocidas por Emakunde, el Instituto Vasco de la Mujer, como entidad colaboradora en el Plan de Igualdad de Oportunidades. Este plan tenía entre sus objetivos utilizar el empleo como motor de cambio para conseguir una igualdad real en la sociedad. Las organizaciones que nos adherimos nos comprometimos a detectar las desigualdades y a poner en marcha medidas que paliaran el problema.

Afortunadamente, gracias, entre otros factores, a las medidas que pusimos en marcha, el porcentaje de socias trabajadoras en nuestra cooperativa mantiene un incremento sostenido. Si en 2006 el porcentaje de mujeres era de 39,6% una década después esa cifra llega al 45,9%. Si continuamos con esta tendencia, somos optimistas y creemos poder alcanzar la paridad en pocos ejercicios.

Techo de cristal

No obstante, de poco sirve contar con una plantilla con igual número de hombres y mujeres si la representación no se mantiene en todos los niveles: sabemos que tenemos que hacer un esfuerzo más intenso para acabar con el ‘techo de cristal’ para acceder a los puestos directivos, esa barrera invisible pero real que dificulta a las mujeres ascender en las organizaciones. Se trata de un mal que afecta prácticamente a todas las empresas pero que no nos resignamos a sufrir.

El porcentaje de directivas y jefas en nuestra entidad es del 22,7%, una cifra inferior a la que nos gustaría. Esto quiere decir que aún tenemos que seguir trabajando duro para alcanzar la igualdad real de mujeres y hombres.

Consideramos que la mejor manera de avanzar es perseverar en la transparencia: por eso tenemos el compromiso de detallar anualmente en nuestra memoria de Responsabilidad Social Empresarial la composición de los órganos de gobierno corporativo y de la plantilla, desglosados por tipo de trabajo, género y grupo de edad. Es la mejor manera de compartir nuestros avances y obligarnos a cumplir con nuestros compromisos. El día en que estas cifras se ralenticen sin haber conseguido su objetivo quedaríamos en evidencia.

Plan para la igualdad

Recientemente, hemos aprobado nuestro tercer Plan para la Igualdad de Mujeres y Hombres, que se extenderá durante 2016 y 2019. Los objetivos de tercer Plan para la igualdad son claros: garantizar la igualdad real de oportunidades entre mujeres y hombres en toda la actividad de LABORAL Kutxa. Así de simple y así de complicado.

Los motores del Plan son la responsable y coordinadora del mismo y la Comisión de Igualdad. Todas ellas velan para conseguir los objetivos establecidos en cada una de las cinco líneas de trabajo definidas en el Plan:

  • Comunicación y sensibilización
  • Cultura empresarial
  • Conciliación y corresponsabilidad
  • Promoción y empoderamiento
  • Responsabilidad social
No se trata de objetivos grandilocuentes que carecen de un contenido tangible y aplicable al día a día: se han marcado los hitos correspondientes a cada línea de trabajo y las acciones específicas que se van a llevar a cabo para alcanzarlos.

Así, por ejemplo, nos comprometemos a utilizar tanto de forma interna (en las comunicaciones en el seno de la cooperativa) como externa (anuncios, promociones, folletos…) un lenguaje inclusivo que visibilice que somos un colectivo en el que trabajamos mujeres y hombres y que nos dirigimos a toda la sociedad.

  • Por otro lado, intentaremos sensibilizar a nuestros compañeros y compañeras a través de distintas actividades. Creemos que es necesario tomar conciencia de la situación para poder realizar un verdadero cambio.
  • También queremos analizar cómo es el trato que proporcionamos a nuestras clientas y clientes, siempre, teniendo en cuenta la perspectiva de género.
  • De la misma manera, daremos especial importancia al empoderamiento de las mujeres, para poder ir, poco a poco, superando el techo de cristal.
Desde nuestra experiencia de más de dos décadas en esta lucha, podemos decir que el resultado merece la pena. Queremos ser una entidad más rica y diversa que esté abierta al 100% de la sociedad. En LABORAL Kutxa queremos dar respuesta a las necesidades a quienes confían en nosotras y nosotros, y eso sólo es posible si en nuestro interior también está representada por igual la sociedad de la que formamos parte.


¿Cuál es tu reacción?


Otras etiquetas relacionadas

Cooperativismo