¿Qué hacemos en LABORAL Kutxa para promover sociedades justas, pacíficas e inclusivas?

Los conflictos, la inseguridad, las debilidad de las instituciones públicas y el acceso limitado a la justicia suponen una grave amenaza para el desarrollo sostenible en decenas de países de todo el mundo. Los datos son desalentadores.  En 2018, más de 70 millones de personas huyeron de la guerra, las persecuciones y los conflictos, la cifra de desplazados más alta registrada en casi 70 años por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR). En 2019, hubo 357 asesinatos y se registraron 30 desapariciones forzadas de defensores de los derechos humanos, periodistas y sindicalistas en más de 40 países de todo el mundo. A día de hoy, una de cada cuatro personas no se registra al nacer y tiene limitado su derecho a la justicia y los servicios sociales el resto de su vida. 

Por eso, el Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) número 16 de las Naciones Unidas y el motivo que ha inspirado la ilustración del mes de febrero en el calendario 2023 de LABORAL Kutxa, es crear sociedades más justas, pacíficas e inclusivas. Sociedades en las que se haya reducido la violencia, el maltrato, la trata, la tortura y la explotación infantil; se garantice la igualdad de acceso a la justicia de todas las personas; y se combatan la corrupción, el soborno, y la delincuencia organizada, así como el tráfico de armas y las corrientes ilícitas de dinero.

Las Naciones Unidas han establecido una serie de metas concretas y queremos contarte qué hace LABORAL Kutxa en el ámbito de su actividad y como entidad comprometida con la Agenda 2030 para colaborar en este fin.

¿Qué hacemos en LABORAL Kutxa para… reducir la corrupción?

Además de deshonesta e ilegal, la corrupción también supone una enorme amenaza para los principios de igualdad y justicia sociales. La ONU calcula que en los países desarrollados la corrupción, el soborno, el robo y la evasión de impuestos cuestan, alrededor de 1,26 billones de dólares; una cantidad de dinero que daría para ayudar durante 6 años a todas las personas del mundo que viven con menos de 1,25 dólares al día.

Poner fin a estas prácticas es, por tanto, favorecer la sostenibilidad, en el sentido más amplio y humano de esa palabra, y en LABORAL Kutxa tenemos el firme compromiso de aportar nuestro esfuerzo en el ámbito de nuestra responsabilidad.

Por eso, tal y como se explica en la Memoria de Sostenibilidad 2021 nuestra entidad cuenta con una política de cumplimiento penal y con varios reglamentos y Códigos de Conducta: el Código Ético y de Conducta Profesional, la Guía de Buenas Prácticas y Secreto Profesional, y el Reglamento Interno de Conducta específico para el mercado de valores. Además, tenemos un Comité de Ética que funciona como órgano de prevención penal, tiene la misión de promover un comportamiento ético de la entidad y resuelve las cuestiones que se planteen en el Canal de Denuncias. También contamos con un departamento de Auditoría Interna y un departamento de Cumplimiento Normativo para evitar las irregularidades y vigilar el cumplimiento de normas y procedimientos.

Además, no solo nos sometemos a las revisiones del Banco de España, sino que, cada año, analizamos nuestras unidades de negocio para garantizar que no se producen incidentes de corrupción. En 2021, analizamos más de 90 unidades de negocio de manera presencial y el 100% de manera online, sin que se registraran incidentes de corrupción.

¿Qué hacemos para… hacer frente al blanqueo de capitales?

Cuando se trata de hacer frente a prácticas corruptas y sobornos, las políticas de gestión de LABORAL Kutxa han identificado los mayores riesgos en la lucha contra el blanqueo de capitales y la financiación del terrorismo.

Para hacerles frente y prevenirlos nuestra entidad cuenta con un Órgano de Control Interno (OCI) que se encarga de hacer cumplir nuestro “Manual de Prevención del Blanqueo de Capitales y de la Financiación del Terrorismo”. Este manual establece las políticas de admisión de la clientela que deben tener en cuenta las personas que forman parte de nuestra plantilla y tiene como objetivo implantar normas de actuación y sistemas de control y comunicación adecuados para impedir que se canalicen a través de LABORAL Kutxa fondos de origen delictivo.

Además, nuestros procedimientos de control interno están sometidos a una evaluación anual por expertos externos. Así, nos aseguramos de que nuestras políticas de prevención sean eficaces y estén sometidas a un proceso de mejora continua que contribuya a reducir la exposición a los riesgos relacionados con el blanqueo de capitales y la financiación al terrorismo. En 2021 contratamos los servicios profesionales de Pricewaterhouse Coopers Auditores S.L para la elaboración de este informe.

¿Qué hacemos en LABORAL Kutxa para… crear instituciones eficaces y transparentes, y garantizar la adopción de decisiones inclusivas, participativas y representativas?

Esta es otra de las metas que insta a cumplir la ONU para lograr el ODS número 16 y cumplir con la Agenda 2030. Y es que las sociedades humanas son más justas, pacíficas e inclusivas cuanto más transparentes, democráticas y representativas sean las instituciones que las gobiernan, las representan y forman parte de ellas. Así ha sido siempre y así seguirá siendo LABORAL Kutxa, que se fundó como cooperativa en 1959 y, que más de 60 años después, sigue apostando por una forma de hacer banca basada en principios de democracia, cooperación, solidaridad, igualdad y transparencia.

Somos más de 2.200 socias y socios trabajando en una entidad cooperativa de crédito que no cotiza en bolsa, que invierte el 25% de sus beneficios en proyectos cooperativos, culturales, deportivos, formativos y de investigación, y cuyo máximo órgano de decisión es una Asamblea General en la que las decisiones se toman de forma participativa y democrática y donde cada persona socia tiene derecho a voto.

Estuvimos entre las primeras entidades bancarias del mundo en firmar los 6 Principios de Banca Responsable propuestos por la ONU, hemos obtenido el certificado EthSI en reconocimiento a nuestros seguros éticos y solidarios, y fuimos la primera entidad del sector financiero con un Sistema de Gestión Ambiental certificado por AENOR.

Creemos que hay otra forma de hacer banca y lo creemos porque la hacemos a diario.

¿Qué hacemos en LABORAL Kutxa para… promover y aplicar leyes y políticas no discriminatorias?

En 1997, LABORAL Kutxa fue la primera empresa vasca en conseguir la certificación de Entidad Colaboradora de Emakunde, un hito en nuestra historia y en la historia de las políticas de igualdad del entorno socio-laboral y el sector financiero vascos. Avanzar hacia una igualdad real y no solo legal está en la base de nuestra identidad, y nos ha llevado a lograr hitos que nuestro Consejo Rector sea el primer y único totalmente paritario de todo el sistema bancario español. Eso es, nuestro principal órgano de dirección está compuesto en un 50% por hombres y mujeres, frente a la media del IBEX-35, que es de un 33,5% de mujeres. No deja de ser un reflejo de nuestra plantilla, en la que ya hay más socias -las mujeres suponen el 51,86 % del total-, que socios. Existe todavía una brecha salarial del 12,2 % entre hombres y mujeres (la media en el Estado español es del 29,3 %) que se está reduciendo año a año y que se explica por la todavía mayor presencia de los hombres en los puestos de mayor responsabilidad.

Pero la igualdad de género no es la única que nos preocupa. Entendemos la igualdad en su sentido más amplio y por eso tenemos una política retributiva que refleja nuestra misión como empresa solidaria y nuestro deseo de contribuir a una sociedad más justa. Así, en LABORAL Kutxa la persona que más cobra lo hace 4,76 veces la retribución mediana de la plantilla. Frente a eso, están las empresas del IBEX-35, en las que la persona que más cobra lo hace, de media, 118 veces más que la retribución media de la plantilla.

En LABORAL Kutxa miramos con orgullo a lo que hemos hecho para ser una entidad inclusiva, participativa y democrática, como aspira la ONU a que sean las sociedades del futuro y lo decimos con la humildad de quien sabe que 2030 está a la vuelta de la esquina y a las personas, entidades, instituciones, y gobiernos comprometidos con la sostenibilidad nos queda mucho por hacer para lograr sociedades más justas, pacíficas e inclusivas.